Los seguidores del Dios Huitzilopotchi le pidieron que les indique donde tendrían que fundar México, él les mostró en sueños a un águila que estaba sobre un nopal devorando a una serpiente, este escenario ellos luego de mucho caminar lo encontraron y se dieron cuenta que allí mismo debía ser,
sin embargo algunos no siguieron el camino porque adoraban a otro Dios y éste no les había mandado ningún mensaje de cambiar el sitio en donde se encontraban, pero aún así no era seguro. En agradecimiento de algo tan bello como lo que construyeron, es que en la bandera se grabó este símbolo.